Château la Pierrière

Fue construida por el señor Izambert, que emprendió las obras en el siglo XIII, y ampliada por François de Lageard en el siglo XVII, cuando recibió el château como dote en su matrimonio con Marguerite de Puyperron. Se creó entonces un patio interior y se erigió una capilla cerca de la propiedad. El edificio fue terminado en 1865 por Léonard de Fageard, que construyó una torre redonda para su nieta.

Desde su creación en 1871, Kressmann vio en esta propiedad un potencial a explotar. Al igual que Château Latour-Martillac, que destaca por la calidad de sus Graves, Château La Pierrière hace lo propio con Saint-Émilion.

Sin embargo, la finca no está incluida en la zona de esta denominación, por lo que el sistema de denominación priva a la propiedad de esta ventaja. Así que Edouard Kressmann decidió crear una colaboración con Château La Pierrière, que sigue siendo el château más antiguo con el que trabajan los Kressmann. La Pierrière pasó a formar parte de la familia Marcillac en 1930.

Aunque la propiedad no goza del privilegio de pertenecer a la denominación, el suelo donde crecen sus vides es arcillo-calcáreo y muy similar al de Saint-Emilion. La Merlot, mayoritaria, va acompañada de Cabernet franc y sauvignon.

La Pierrière perpetúa el savoir-faire transmitido de generación en generación para mantener las tradiciones vinícolas de la región al tiempo que emplea técnicas modernas.