20 vinos para hipsters

Tanto si te consideras hipster como si no lo eres pero quieres descubrir nuevos vinos, así como si quieres regalar a algún amigo que sí lo es, aquí te proponemos una veintena de vinos muy alternativos:

1. Macho Man Monastrell (Tinto de Jumilla)

Pocos vinos encontrarás con una estética tan hipster como éste, con una etiqueta protagonizada por un forzudo lleno de tatuajes. Se trata de un vino elaborado al 100% con la uva Monastrell que se muestra elegante, coqueto, afrutado y muy redondo. Fue elegido entre los 100 mejores vinos de España por el reputado crítico internacional Tim Atkin.

2. Loco (Blanco de Méntrida)

Un vino a medio camino entre la genialidad y la locura, con una camisa de fuerza incorporada en su botella. Procedente de viñedos toledanos, es un vino hecho en su totalidad con la variedad Garnacha blanca, muy poco habitual en la zona centro de España. Le avalan los 91 puntos Parker de su última añada. (sanjaytaxpro.com)

3. Villano Roble (Tinto de Castilla y León)

Otro vino de estética desenfadada, con un hombre de capa y sombrero que protagoniza su etiqueta. Sus responsables son los chicos de Viñas del Cénit, una de las bodegas zamoranas más destacadas. Se muestra muy aromático, con buen volumen y unos taninos redondos.

4. Crápula (Tinto de Jumilla)

Un vino para calaveras, exponente de los Jumilla más contemporáneos. Como manda la región, está elaborado principalmente con Monastrell, aunque incorpora también una leve proporción de variedades foráneas (Syrah y Cabernet). Tinto frutal y jugoso con una estética elegante.

5. Spanish White Guerrilla Viognier (Blanco de Rioja)

Un blanco detrás del cual está el recién nacido proyecto Democratic Wines, que buscan crear vinos con una estética moderna y muy divertida. Con este vino tendréis la posibilidad de comprobar cómo se comporta una variedad foránea como la Viognier en tierras riojanas. El resultado: un vino envolvente, con aromas florales y con tostados aportados por la barrica.

6. Sin complejos (Tinto de Toro)

El nombre de este vino es toda una declaración hipster, y su presentación también es desenfadada, con las manos de la propia elaboradora tapándose la cara. Una estética femenina para un vino que estamos seguros que deleitará a las consumidoras más alternativas. Un vino muy amable con una estupenda relación calidad/precio.

7. 4 monos (Tinto de Gredos)

Aunque está etiquetado bajo la D.O. Vinos de Madrid, este vino elaborado principalmente con Garnacha tinta procede concretamente de viñas viejas de la Sierra de Gredos. Su simpático y alternativo nombre está tomado de los cuatro amigos que lo elaboran: David, Laura, Javier y David.

8. Garnacha salvaje del Moncayo (Tinto del Valle del Ebro)

Un vino elaborado en una región desconocida para muchos aficionados como es la Ribera del Queiles, entre Navarra y Aragón, que demuestra gracias a su redondez y frescura que la Garnacha vieja es una de las variedades de moda en el mundillo vinícola.

9. El Pícaro (Tinto de Toro)

Hablando de vinos hipsters, no puede faltar alguna muestra de Vintae, el grupo logroñés que despunta por elaborar buenos vinos con una estética muy actual sin perder la esencia de lo clásico. El Pícaro es uno de sus mejores ejemplos, uno de los tintos jóvenes que pisa más fuerte en el panorama nacional.

10. La bruja avería (Tinto de Gredos)

Los responsables de este simpático tinto son los chicos de Comando G, otros hipsters sin remedio al que debemos agradecerles y mucho unos vinos que además de destacar por sus originales etiquetas, sobresalen por expresar la tipicidad de la Garnacha de Gredos, en este caso, bajo un vino que es tremendamente frutal, fluido y elegante.

11. Bienbebido come queso (Tinto riojano)

Como muestra del simpático e irreverente muestrario de Bienbebidos, la gama de tintos riojanos bajo la que se encuentran los mencionados chicos de Democratic Wines, hemos elegido este tinto perfecto para maridar con una buena tabla de quesos, ya que su tanicidad encaja perfectamente con la grasa de este alimento.

12. El Marciano (Tinto de Castilla y León)

Otro vino descaradamente hipster, tanto por su nombre como por su presentación y su elaboración, donde predominan las técnicas propias de la viticultura biodinámica. El vigneron que está detrás de su concepción es Alfredo Maestro, quien ha sabido sacar del olvido viñedos viejos del entorno de la Sierra de Gredos.

13. Botijo rojo (Tinto de la IGP Valdejalón)

¿Puede existir un icono más hipster que un botijo rojo? No lo creemos. Esta combinación de tradición y modernidad desde la etiqueta viene representada por este tinto aragonés elaborado por Mario y Fernando, amigos que están al frente del pequeño proyecto The Garage Wines. Su elaboración también es curiosa, ya que solo el 5% del vino realiza una leve crianza.

14. Payoya negra (Tinto de la Sierra de Málaga)

Son muchos los elementos que tiene este vino para ser considerado “alternativo”. Primero porque procede de una tierra magnífica para los vinos pero no en la mente de muchos aficionados como es la serranía de Ronda, después porque está elaborado principalmente con una variedad minoritaria como es la Tintilla de Rota, y finalmente por su nombre, dedicado a la cabra autóctona andaluza que ilustra su etiqueta.

15. Gallinas & Focas (Tinto de Mallorca)

Un vino diferente y con una historia muy humana detrás, ya que se elabora en colaboración entre la bodega mallorquina 4 Kilos y un colectivo de personas con discapacidad, quienes diseñan también su original etiqueta. Un vino divertido, muy disfrutable, equilibrado y con un importante componente frutal.

16. Negre de negres (Tinto del Priorat)

Las inspiradoras y oníricas etiquetas de los vinos de Alfredo Arribas tienen un ejemplo en este vino, procedente de un viñedo que se gestiona en orgánico y que está en conversión a ecológico/biodinámico. Un vino que nosotros llamamos de “terroir”, muy apegado a la tierra que lo ve nacer.

17. Neo (Tinto de la Ribera del Duero)

En este vino no encontraremos una etiqueta de estética rompedora y moderna, pero lo catalogamos como hipster ya que conocemos a la bodega de la que procede, una de las únicas del mundo con un estudio de grabación en sus instalaciones, por donde han pasado numerosos grupos indies españoles.

18. Atlantis Txakoli (Blanco del País Vasco)

Los chicos de Vintae también se atraven con el Txakoli. En concreto este está elaborado bajo la denominación alavesa y nos sorprende con su estética moderna a la par que elegante y marinera, y es que estamos ante un vino muy influenciado por la cercanía del Cantábrico. Se muestra fresco, con aromas cítricos y notas florales.

19. Te la dedico (Blanco de Terra Alta)

Terra Alta es una pequeña región vinícola del interior del sur de Cataluña limítrofe con Aragón donde se obtienen exquisitas rarezas como este blanco compuesto por un 60% de Garnacha blanca y un 40% de la poco común Chenin blanc. Procedente de dos pequeñas parcelas y es un vino con una acidez salina que nos deja un posgusto de frutos secos.

20. Tristras (Tinto de Castilla-La Mancha)

‘Tristrás, ni lo ves ni lo verás’, este verso del cancionero popular sirvió a Pago Casa del Blanco para bautizar a este original vino que surgió después de las catas que solían hacer antes de su crianza en barrica, extrayendo directamente el vino de los depósitos de fermentación. 100% Syrah en el que predominan aromas de fruta madura y un fondo de chocolate amargo.