Cinco propuestas para celebrar San Isidro en casa
“Cuando llegues a Madrid, chulona mía, voy a hacerte emperatriz de Lavapiés… “ Probablemente esta sea la letra de uno de los chotis más sonados de las fiestas de San Isidro. La situación actual nos deja sin ir a celebrar con nuestros seres queridos la fiesta más castiza de la capital, que tiene lugar el 15 de mayo en honor al patrón de la ciudad, al que se le atribuyen más de un centenar de milagros. Pero no os preocupéis, la Pradera va a seguir estando ahí y el año que viene la visitaremos con más ganas. (Diazepam)
Confinados o no, San Isidro es una de las fiestas más importantes para los madrileños, ya sean gatos o “de acogida”. Dice el escritor Santiago Isla en su libro Buenas Noches que la principal virtud de Madrid es que nadie es de Madrid, y que “los castizos dicen eso de que encontrar un gato es como encontrar un trébol de cuatro hojas”, pues “nadie junta abuelos, padres e hijos nacidos aquí”. Por ese motivo, para el forastero es imposible no sentirse bienvenido, ya que “los huéspedes de hoy son los futuros anfitriones”.
Así que no desesperes, nosotros tampoco queremos renunciar a la fiesta más emblemática de la capital, por tanto te animamos a vivirla en casa, solo o acompañado mientras realizas una vinollamada y disfrutas de los mejores vinos de Madrid y la vecina Méntrida.
Abrimos nuestras propuestas con el Vermut Zecchini Edición Especial Madrid. Un clásico de la capital presente en un sinfín de bares y restaurantes. La bonita botella de esta edición especial rinde homenaje a la villa de Madrid, a sus calles, a sus gentes, a su esencia y a su halo castizo. Te recomendamos servirlo con mucho hielo y prepararte para disfrutar de sus notas a naranja amarga, canela y destellos acaramelados.
El siguiente vino que te recomendamos es Licinia, uno de los vinos más conocidos de Madrid. Se trata de un tinto de gama media-alta elaborado en el entorno de la localidad de Morata de Tajuña. Un tinto con mucha presencia de fruta negra y notas terciarias bien integradas, con mucho equilibrio entre alcohol y acidez y con una buena capacidad de envejecimiento.
Seguimos con otro tinto de Madrid, El Regajal Selección Especial 2018. Elaborado a partir de un coupage de Tempranillo, Cabernet sauvignon, Merlot, Syrah y Petit verdot de viñedos de 20 años de edad. Como curiosidad, la finca el Regajal se encuentra en Aranjuez y es conocida por todos los entomólogos del mundo ya que en ella pueden encontrarse hasta un tercio de las mariposas censadas en la Península Ibérica.
Si te consideras más de vino blanco, no puedes dejar de probar Albillo Real 2018, un blanco elaborado con uvas de viñas viejas situadas en Almorox (Toledo). Puntuado con 91 Parker, es un vino muy fresco, cítrico, con fruta blanca y un toque floral.
Terminamos nuestra propuesta con un tinto con muy disfrutón y con excelente relación calidad-precio: Muss 2017, un coupage de distintas variedades de uva tinta de viñedos ubicados en Arganda del Rey, dentro de la D.O Vinos de Madrid.
Esperamos que te hayan gustado nuestras propuestas. No dejes de visitar nuestra web para estar al tanto de todas las novedades y feliz San Isidro.
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