Guía práctica para enamorarse de los vinos del Loira

Desde que me dedico al mundo del vino, tengo un sueño que espero cumplir muy pronto: hacer un roadtrip por el valle del Loira… Sé que es una de las aventuras más emocionantes que un winelover puede vivir.

Desde su nacimiento en el Macizo Central hasta su desembocadura en el Atlántico, el Loira (el río más largo de Francia) recorre el país del sureste al oeste invitándonos a explorar 1.000 kilómetros de palacio en palacio y viñedo en viñedo. 

Estos paisajes son la cuna del idioma francés, el lugar donde Juana de Arco lideró a sus tropas en la Guerra de los Cien Años, la residencia de monarcas y, por supuesto, el reino indiscutible de la Sauvignon blanc, la Cabernet franc y la Chenin blanc.

Desde el clima marítimo de Nantes al continental de Sancerre, en este recorrido emerge una gran diversidad de estilos. Por eso, todo amante del vino encuentra un flechazo en esta región de frescos y minerales blancos, rosados de talla mundial, hechizantes Chenin blancs, Cabernet francs eternos y vinos dulces bendecidos con la adorada botrytis. 

Para poder comprender esta región tan extensa, la hemos dividido en varias subzonas de oeste a este.

NANTES Y ALREDEDORES

Reconocida por sus vinos blancos frescos y salinos, las viñas de Nantes se encuentran a pocos kilómetros del Atlántico, entre los ríos Loira, Sèvre y Maine. Aquí las cepas sobreviven a un desafiante clima marítimo con frecuentes precipitaciones.

Los suelos pedregosos, de esquisto, mica, granito y arena son una de las claves del éxito de esta zona. Gracias a su excelente capacidad para drenar el exceso de agua, permite a las cepas encontrar el equilibrio perfecto.

Dentro de sus distintas apelaciones, las más destacadas son Muscadet AOC y la estrella de Nantes: Muscadet de Sèvre et Maine AOP, que alberga Cru Communaux con algunos de los mejores ejemplares del mundo de la variedad Melón de Borgoña.

PRIMERA PARTE DEL LOIRA CENTRAL

Nos adentramos en una de las zonas más elegantes del país, entre las ciudades de Angers y Tours. En esta área, conocida como “El jardín de Francia”, el clima marítimo es más suave y las viñas, cultivadas en viñedos llanos, gozan de un clima más soleado y cálido. Un extenso número de subzonas y AOCs se esconden en estos terruños. Aquí hemos seleccionado las imprescindibles.

Anjou

Mientras que en el oeste de Anjou se encuentra el conocido “anjour noir”, el suelo de esquisto negro que da vida a vinos más estructurados, en el este los productores gozan del famoso “tuffeau blanc”, la piedra caliza con una gran cantidad de fósiles marinos, ideal para la creación de espumosos de altura.

No obstante, Anjou debe su fama sobre todo a los rosados elaborados con Cabernet franc junto con otras variedades típicas de la región y a sus vinos dulces botritizados de Chenin blanc. Entre ellos se encuentra la apelación Quarts de Chaume, un Grand Cru que ostenta uno de los mejores vinos dulces del mundo. 

Saumur

Después de Champagne, Saumur es la estrella indiscutible de los espumosos franceses. Al igual que en Anjou, la clave del éxito de estas burbujas es su privilegiado suelo de roca calcárea que fue excavado hace siglos creando largos túneles y excelentes cavas subterráneas, ideales para la crianza mediante el método tradicional. 

Bourgueil, Chinon y St-Nicolas de Bourgueil  

Bienvenido al paraíso de los amantes de la Cabernet franc. En estas AOCs la enigmática variedad alcanza su cenit y enamora con su perfil vivo, su jugosa fruta roja, sus notas herbáceas y ligeramente picantes y sus sutiles recuerdos minerales y ahumados. 

Estos viñedos disfrutan de un microclima entre océanico y continental. Un auténtico paraíso donde los suelos de grava, arcilla y caliza contribuyen a la óptima maduración y a la vibrante acidez característica de los mejores Cabernet franc. 

Dependiendo del terruño de cada parcela, aquí te esperan desde referencias frescas y tremendamente fáciles de beber hasta joyas con una increíble profundidad y capacidad de guarda. 

Vouvray y Savennières

Si Bourgueil y Chinon son los lugares de culto de la Cabernet Franc, Vouvray y Savennières lo son de la Chenin blanc. 

En Vouvray esta uva tan versátil y cautivadora brilla en espumosos y blancos que se pueden disfrutar en todos los estilos, desde secos hasta dulces botritizados. La esencia varietal palpita en cada trago y enamora con sus notas florales, cítricas, de membrillo y sus apuntes minerales.

Aunque en Savennières también se producen vinos dulces, esta AOC debe su fama a sus Chenin blanc que durante su evolución en botella desarrollan infinidad de matices. 

SEGUNDA PARTE DEL LOIRA CENTRAL

Situados exactamente en el centro de Francia, estos viñedos son el reino de la Sauvignon blanc. En esta zona la influencia oceánica ha desaparecido por completo y las viñas disfrutan de un clima continental. Además, esta es una de las mejores áreas del mundo para sentir la magia del terroir en cada trago, ya que los suelos tiene un gran impacto en el perfil de los vinos. Por eso es imprescindible conocer sus tres principales tipos de terruño:

Los suelos Kimmeridgian, compuestos de arcilla y piedra caliza, son famosos por su alto contenido en fósiles marinos que aportan la característica mineralidad y salinidad. Este tipo de suelo da vida a referencias con una gran intensidad, estructura y capacidad de guarda.

Por su parte, en los Caillottes predomina la piedra caliza y los vinos de estas parcelas resultan más finos y perfumados. 

Por último, el Sílex tiene un alto contenido de pedernal, responsable del sabor pedregoso y sutilmente ahumado de sus blancos. Una sensación sencillamente inimitable.

Aunque hay varias AOCs de innegable prestigio, de esta zona destacan Sancerre y Pouilly-Fumé. La primera es sin duda la artífice del éxito mundial de la Sauvignon blanc del Viejo Mundo. Además, gracias a la proximidad y similitudes con Borgoña, también es conocida por su vibrante y elegante Pinot noir. Por su parte, los vinos de Pouilly-Fumé son deseados por sus características notas ahumadas (de ahí el término fumé).

EL LOIRA SUPERIOR

Aunque reciben mucha menos atención que los vinos de las otras zonas, los vinos de la parte alta del Loira tienen un gran potencial. Aquí la Gamay, la Pinot noir, la Sauvignon blanc, la Chardonnay y la Sacy (una uva blanca muy poco conocida) toman el mando y seducen a todos los afortunados que logran encontrar estas perlas.  

Esperamos haber encendido tu curiosidad sobre el valle del Loira con esta breve guía sobre sus zonas vinícolas. A continuación, te dejamos algunas recomendaciones que, gracias a su gran relación calidad-precio, son ideales para iniciarse copa en mano en esta fascinante región.