Heuriger: las tabernas austriacas donde se celebra el vino
Cuando se habla de los destinos enoturísticos más populares, rara vez se menciona Austria y, sin embargo, este país centroeuropeo es un auténtico paraíso para los amantes del vino. Viena, en concreto, es una de las pocas ciudades del mundo que cuenta con más de 600 hectáreas de viñedos en su área metropolitana, lo que demuestra la estrecha y profunda conexión que existe, desde hace siglos, entre sus habitantes y sus viñas.
Uno de los lugares típicos donde se celebra este homenaje al dios Baco son los Heuriger, acogedores locales donde se sirve una selección de platos fríos o calientes para acompañar exquisitos vinos de producción local.
El origen de los Heuriger se remonta a 1784, cuando el emperador José II de Habsburgo concedió a todos los ciudadanos el derecho a vender comida y vino siempre que lo produjeran ellos mismos. El término Heuriger significa «En este año», ya que estas pintorescas tabernas sólo abren ciertos días del año y únicamente venden vino de cosecha.
Ahora, como desde hace casi tres siglos, los taberneros exhiben una rama de pino en su portal, para anunciar que el vino está listo y que, por tanto, la tasca está abierta. Un rasgo característico de los Heuriger es, sin duda, el ambiente acogedor y festivo que se respira, las veladas suelen estar amenizadas por conciertos de música popular que se celebran en los patios de estas fantásticas tabernas.
En algunos casos, y con buen tiempo, es posible encontrar algunas mesas directamente instaladas en los viñedos y disfrutar así de una experiencia bucólica y emocionante. En mi viaje a Viena, tuve la suerte de almorzar directamente entre las hileras de una preciosa viña, disfrutando de un hermoso panorama que se extiende desde las colinas cubiertas de vides hasta los palacios de la capital austriaca. Un momento de profundo placer hedonista y también de serenidad y convivialidad.
Por qué visitarla
Los Heuriger son el lugar ideal para disfrutar de una auténtica experiencia vinícola austriaca, donde apreciar los vinos jóvenes y disfrutar de la gran tradición gastronómica local. En estos establecimientos también se puede conocer el alma festiva y alegre del pueblo austriaco, gente extremadamente amable con una gran e ilustre historia que se refleja en la grandeza monumental de la capital.
Estas austeras posadas de las afueras de la ciudad son el contrapunto a el esplendor de la arquitectura vienesa, haciendo que nos evadamos de los magníficos salones barrocos de los palacios aristocráticos, para sumergirnos en la riqueza y la generosidad de la tradición rural, donde entre jarras de vino, Wiener Schnitzel (el famoso escalope de cerdo empanado al estilo vienés) y la inevitable ensalada de patatas, se celebra el ritual pagano de disfrutar y compartir los frutos de la tierra.
Qué Comer
Sin lugar a dudas, la comida y el vino son el mayor atractivo de los Heuriger. En estas tabernas se sirve a los clientes comida y vino elaborados por los propios productores y sus vinos de cosecha. La comida se sirve en forma de bufé, y consiste en platos fríos, como embutidos locales, quesos y ensaladas, y platos calientes, como el típico Schnitzler vienés y los Knödel (albóndigas de patatas).
Uno de los platos que más me gustaron fue la manteca de cerdo aromatizada con hierbas y especias, un plato sencillo y exquisito que marida a la perfección con las notas afrutadas y especiadas del grüner veltliner, la aromaticidad de un riesling seco y también la fresca expresividad de un pinot noir joven. No dejes de probar una copa de wiener gemischter satz, el «vino de Heuriger» por excelencia, fruto de una variedad típica de la zona de Viena que se convirtió en denominación de origen protegida (DAC) en 2013.
Qué visitar
Buschenschank & Bioweinbau Obermann, situado a pocos metros de Grinzinger Hauptplatz, está reconocido como uno de los mejores Heuriger de toda Austria. La calidad de sus vinos procedentes de viticultura ecológica está a la altura de la destreza con la que preparan platos tradicionales como el cerdo asado o la ensalada de col. Se puede disfrutar de vinos blancos y tintos en un acogedor patio donde también se sirve comida en forma de bufé. Los precios son muy populares y esto hace que el restaurante esté muy concurrido los fines de semana.
Para acabar con el mito de que en Austria sólo se come carne, Biofisch Bistro & Heuriger es el lugar ideal para quienes quieran disfrutar de pescado acompañado de un excelente vino. En este Heuriger se practica la piscicultura ecológica de primera calidad, productos que, por supuesto, también se pueden degustar en el característico Heuriger/Bistró situado no muy lejos de la estación de Hetzendorf.
Italiano del sur, enamorado de Madrid y por supuesto de los vinos españoles. Entusiasta redactor de contenidos en el equipo de Bodeboca. Licenciado en Bellas Artes en Roma y apasionado lector, me encantan los cómics, los picoteos, los vinilos de música jazz y exótica. Después de obtener la calificación Nivel 3 del WSET he decidido dedicarme al mundo del vino siempre en busca de nuevos horizontes.
