Lera, a la búsqueda de sabores perdidos
Hay algunos restaurantes que consiguen tocar profundamente nuestras cuerdas del placer y evocar preciosos recuerdos. Tuve la suerte de asistir a un memorable banquete en Lera en compañía de los participantes del taller gastronómico del Círculo de Bellas Artes, una escapada que nos permitió descubrir la gran habilidad del chef Luis Alberto Lera, así como la altísima calidad de los productos locales.
Situado en la estructura de un antiguo palomar de Castroverde de Campos, un pequeño pueblo de la provincia de Zamora, Lera se encuentra en un lugar donde reina la paz, y aunque la antigua iglesia de Santa María del Río es la institución sagrada del lugar, este restaurante es una meca mundana y profundamente hedonista en una zona muy afectada por la despoblación rural. Una catedral de los sentidos, suspendida entre el pasado y el presente, donde sabores y recetas de antaño se interpretan en clave contemporánea.
Aquí reinan la caza, las setas, los guisos y los sabores silvestres, como el pichón bravío de Tierra de Campos, un producto de altísima calidad en peligro de desaparición. Por supuesto, también hay una gran apuesta por el maridaje, con una bodega bien surtida de etiquetas regionales (descubre las referencias de la D.O. Vinos de Toro y Castilla y León en nuestro catálogo). Siempre he pensado en Lera como el lugar ideal para descansar del ajetreo de la ciudad, para regenerar cuerpo y alma y disfrutar de una profunda tranquilidad que ya es un lujo ancestral y no forma parte de nuestra época.
No te pierdas…
- Los platos de caza y el pichón bravío
- Poder descansar en el hotel después de cenar y disfrutar de un excelente desayuno a la mañana siguiente
Nos gusta por…
- La atmósfera cercana y la atención al detalle
- Disfrutar de la pasión y dedicación de quienes aman su tierra
Dirección
C/ Conquistadores zamoranos, 6 – 49110 Castroverde de Campos (Zamora)
Teléfono
980 66 46 53
Italiano del sur, enamorado de Madrid y por supuesto de los vinos españoles. Entusiasta redactor de contenidos en el equipo de Bodeboca. Licenciado en Bellas Artes en Roma y apasionado lector, me encantan los cómics, los picoteos, los vinilos de música jazz y exótica. Después de obtener la calificación Nivel 3 del WSET he decidido dedicarme al mundo del vino siempre en busca de nuevos horizontes.