Cata y maridaje con las Special Releases 2023 de Diageo
El pasado miércoles 25 de octubre fue una tarde-noche espectacular para este juntador de letras y para un reducido número de clientes de Bodeboca con los que asistí a un evento muy especial que organizamos junto a Diageo: catar en exclusiva la nueva Special Releases 2023 de la mano de Jorge Pineda, Luxury Scotch Brand Ambassador de Diageo, en el espacio The Penthouse by WOW de Madrid.
Este es el segundo año que presentamos las Special Releases en Bodeboca y hemos creado una Venta sobre la reciente salida al mercado de la nueva colección 2023, formada por ocho whiskies muy especiales provenientes de sendas destilerías de varias zonas de Escocia. Todos tienen muchas singularidades, ya que son auténticas rarezas por sus acabados en barricas especiales que rinden tributo a pueblos y culturas de varios rincones del planeta.
Los pocos privilegiados que tuvimos la suerte de asistir, vivimos una experiencia única, muy gozosa y gratificante, de la mano experta y el verbo fluido y jugoso de Jorge Pineda, que por si aún no lo conoces le puedes poner voz en nuestro episodio de Sala de Cata.
Muy a nuestro pesar, en esta divertida cata, solamente se dieron a conocer cuatro de los ocho whiskies de la Special Releases 2023, dejándonos los dientes largos por los cuatro que no estaban. Solución: hacernos con ellos aquí. Ante nuestros ojos aparecieron las botellas de Mortlach Special Releases 2023, bautizado como The Katana’s Edge por su terminado en barricas de roble japonés; de Oban 11 Years Old, cuyo sobrenombre para esta colección ha sido The Soul of Calypso, por su relación con el Caribe, al haber sido finalizado en roble que albergó rones antillanos; Talisker Special Release 2023, The Wild Explorador, por su homenaje a los navegantes portugueses de la Era Moderna a través de un añejamiento en barriles que guardaron diferentes tipos de oportos; y Lagavulin 12 Years Old, con el alias de The Ink of Legends, en honor a los pueblos mesoamericanos por su terminación en roble que añejó tequilas de Don Julio Reposado.
Vamos al grano, que tu tiempo es oro: Jorge comenzó la cata en el orden que te puse antes y nos fue explicando cada una de las botellas que primero probábamos a sorbos muy cortos y después con un poquito de agua, ya que al tratarse de whiskies natural cask strength, es decir, embotellados directamente de la barrica sin adición de agua ni colorantes, podrían resultar muy fuertes y perderse matices por el camino, algo que las gotas de agua arreglaban. Tras la degustación y admiración por los líquidos que estábamos probando, apareció la primera sorpresa de la tarde, la nueva edición de Johnnie Walker Blue filmada por primera vez por una mujer, Emma Walker, la nueva master blender de la casa que ha hecho un trabajo extraordinario creando el que para mi es el mejor Blue de los que he conocido.
La segunda sorpresa fue cuando nuestro anfitrión anunció que en ese momento empezaba una nueva cata, pero ahora con comida, con unos extraordinarios platillos pensados por él mismo para cada whisky. Si puedes, replicalo en casa con amigos y familiares. Comenzamos con el Mortlach acompañado de una cecina de carne de Wagyu que era una maravilla. Su infiltración de grasa lo asemejaba a un gran jamón ibérico aunque fuera carne de vaca, y la unión con el whisky fue sensacional, una fusión de la que me costó desprenderme, pero había que seguir avanzando.
La cosa ya estaba lanzada y no tenía frenos, ni falta que hacía. El siguiente paso fue un punto marino con la unión del Oban con un ceviche de pulpo braseado y mango, con su buen toque de lima y de cilantro. Las notas típicas de este whisky que nos conducen al agua marina con su yodo y sus algas, se pegaban al pulpo como una segunda piel y sus recuerdos dulces, por su paso por barricas que contuvieron rones, iban de maravilla con el mango y, por contraste, con el cítrico. La cosa no podía ir mejor.
Pero sí que podía, porque lo que se venía era ya un toque casi cardenalicio, sensual y adictivo, unas tortillitas de maíz con pegote de guacamole y corte de salmón con un punto de chile habanero encima, combinado con Lagavulin 12 Years Old, una fusión estratosférica que haría salivar a un candelabro. Qué derroche de sensaciones entre el ahumado, los toques marinos, afrutados y herbales del bocado, y las notas de turba y sal con paso cremoso, vegetal y un punto dulce que dejaron impregnado en el whisky las barricas de tequila donde se afinó.
Y no menos placentero fue unir Talisker con un plato genuinamente portugués como un bacalao braseado con guarnición de patatas paja para celebrar el afinamiento de este whisky en barricas de roble que envejecieron diferentes tipos de oportos. Qué untuosidad, redondez y armonía.
Sorpresa final. ¡Ni un whisky sin su platillo!, como venimos pregonando en Bodeboca desde hace años. Qué alegría que cada vez haya más expertos y aficionados que se deleiten en descubrir maridajes espectaculares para sacar más partido a sus buenos tragos. Y el maestro Pineda nos dejó para el final un extraordinario jamón ibérico de Guijuelo de una partida especial de Remedios Sánchez, del que se han guardado 50 piezas, siendo esta la número uno certificada, con Johnnie Walker Blue Label Elusive Umami, que así se le ha bautizado. Qué mejor que ir a la búsqueda del sabor umami que con un whisky que lo reivindica y con uno de los sabores más umami que se pueden encontrar en la gastronomía mundial, como el jamón de pata negra. Experiencia increíble, coyunda de sabores y aromas sensacionales, un momento mágico para todos los invitados. Todo el mundo quedó impresionado y seguro que con ganas de más, al menos eso es lo que me ocurrió a mi.
Los que estuvimos ya sabemos de lo que son capaces las botellas de esta edición especial y limitada, muy pocas en el mercado; los que no, espero que se hayan hecho una idea tras leer estas líneas. Si te ha picado el gusanillo, en Bodeboca tenemos la colección completa de las Special Releases 2023 a la venta. Hazte con algunas botellas, las que puedas, para tener un momento inolvidable que contarás a todo el mundo. Puede que Jorge no pueda estar a tu lado para explicarte cada una de estos whiskies y maridajes, pero quien sabe, nada está escrito, todo está en el aire. Qué sería de la vida sin estos momentos. El placer por el placer.
Licenciado en Ciencias de la Información en su rama de Periodismo por la Universidad Complutense, de Madrid y formando parte del equipazo de Bodeboca desde la primavera de 2018. Aparte de encantarme los vinos y los destilados, soy un viajero apasionado al que le gustan mucho el humor, la radio, el fútbol, la historia, el arte, la buena música, la criminología y la literatura. En los últimos tiempos he descubierto la paz en las plantas y la generosidad en los perros: se rumorea que estoy madurando. Ah, y como solamente se vive una vez, mi filosofía vital se encuentra a medio camino entre el hedonismo y el epicureísmo.