Ilusión+

Pau, catalán y Gina, mexicana, se conocieron en China por casualidad. El destino los unió y a la vez los puso a prueba cuando tras ocho años de estancia en China, una hija y otro en camino, a Pau le diagnostican en 2013 ELA, una enfermedad que no tiene cura por ahora y para la que resulta clave la investigación. 

El matrimonio decide volver a España y afrontando la adversidad de una forma sorprendente, inician un proyecto de elaboración de vinos en colaboración con algunas bodegas de Tarragona. Ambos tuvieron que reinventarse y cambiar por completo su vida. Tras pasar por el aula de Emprendimiento de ESADE y la fundación PREVENT deciden crear la marca Ilusión + seleccionando unos vinos que llevan los nombres de la familia. 

Es un proyecto familiar, solidario, que nos ofrece una lección de vida a través del vino. Una bebida que normalmente se disfruta cuando se comparte y que este caso sirve a un propósito noble: por cada botella vendida se destina un porcentaje como donación a fundaciones para combatir y concienzar sobre enfermedades degenerativas. 

Los vinos además son agradecidos, frescos, disfrutables. Botellas con historia, que en este caso nos reconcilian de alguna forma con la vida.