Descripción

Primus "el primero" de Quinta da Pellada es uno de los vinos TOP de la región del Dão. Un súper blend de un interesante ramillete de sonoras variedades autóctonas portuguesas en las que destacan principalmente Encruzado (la autóctona blanca con más potencial en Dão) y Bical pero también aparecen en su ensamblaje uvas como la Terrantez, Cachorrinho, Douradinha, entre otras. Fermentado y criado en barricas de roble francés usado, este blanco es rico y amplio, con una agradable nariz de melón y frutas tropicales y una mineralidad subyacente que aporta complejidad. Un blanco que el catador de Parker para Portugal no ha podido evitar comparar con un blanco de Borgoña

Ficha técnica

La bodega
Tipo
Blanco Fermentado en Barrica
Añada
2015
Grado
13.0% vol.
Variedad
Encruzado, Bical, Verdelho, Malvasia, Terrantez, Cachorrinho, Douradinha
Otros formatos disponibles:
Origen
Dão

Cata

Nariz
Frutas tropicales y cítricos, recuerdos de melón, apuntes minerales, ligeros ahumados.
Boca
Delicada concentración, textura aterciopelada, jugoso y sabroso, estructurado y con un largo final.
Temperatura de servicio
Entre 10 y 12ºC. Se recomienda decantar o abrir por lo menos una hora antes de consumir.
Consumo
Ahora y hasta 2029 en óptimas condiciones de conservación.

Viñedo y elaboración

Descripción
Viñedos situados a 500 metros de altitud sobre el nivel del mar. Viticultura orgánica.
Edad
65 años.
Suelo
Arenas y arcilla sobre subsuelo granítico.
Clima
Continental.
Vinificación
Después del prensado se hace una maceración prefermentativa en frío durante 24 horas. Fermentación larga (de dos meses de duración) mitad en en depósitos de acero inoxidable y mitad en barricas usadas de roble francés de 400 litros de capacidad.
Envejecimiento
3 meses en barricas de roble francés usadas de 5to uso y 400 litros de capacidad.
Embotellado
Embotellado y comercializado dos años despúes de su añada.

Opinión de los críticos

The Wine Advocate:

"The 2015 Primus Quinta da Pellada is a field blend, mostly Encruzado and Bical, with many other traditional grapes. It was aged for six months in well-used French 400-liter barrels (ranging from two to six years in age). One of the region's top whites, this is in fine form this year. It is still a bit unevolved, but it certainly looks brilliant. There is a bit of wood on the nose in its youth but not much. It gets pulled in quickly and disappears. Then, what you get is a refined and sophisticated wine with crisp edges and some tension on the finish to go with its subtle concentration. It feels concentrated while never feeling dense or fat. The finish is long, juicy and pretty tasty. As it airs and warms, its texture becomes velvet. There is not a hair out of place on this understated white. I hate to do it again, but this has all the feel of an elegant white Burg. Despite the impression of gentle harmony, this has a lot going on. It is just too young. Expect it to age well—probably better than indicated. It looks like the best since 2011. It may not be quite as dense as that, but it might be fresher. Let's give this a little time to settle in. We'll be a bit conservative in evaluation just now."