Bodega Castell del Remei

Esta bodega ha estado unida históricamente a dos familias: los Girona, que sentaron las bases del proyecto y desarrollaron la empresa durante los siglos XIX y XX; y los Cusiné, que adquirieron la finca en 1982 y modernizaron las instalaciones para adaptar la producción a las exigencias del nuevo milenio y convertirla en una referencia dentro de la D.O. Costers del Segre.

Como curiosidad, Castell del Remei fue una de las primeras empresas catalanas en comercializar vino embotellado con crianza y marca propia. De hecho, es la quinta marca más antigua de España según el Registro de Patentes y Marcas. Además, Ignasi Girona i Vilanova, impulsor de la bodega, fue pionero en implantar las variedades Cabernet sauvignon y Semillón en la Península Ibérica.

Especial mención merece también la figura de Tomàs Cusiné, que contribuyó en los años 80 a definir el perfil de los vinos de la casa, y en 1997 creó Cérvoles Celler, un proyecto que se convirtió en referente en España y en miembro del exclusivo grupo de Grandes Pagos. Tras su marcha en 2003 para desarrollar sus propios proyectos, Tòmas Cusiné volvió a Castell del Remei en 2014 asumiendo la dirección de la empresa.

Respecto a su ubicación, Castell del Remei se sitúa en el término de Penelles de la comarca de La Noguera, en la provincia de Lleida, a unos 100 kilómetros del mar Mediterráneo. Las condiciones de la finca son propias del clima continental, con amplias oscilaciones térmicas y vientos del oeste y noroeste que se acentúan especialmente durante la primavera, destacando especialmente la Marinada, que en las tardes de verano llega desde el Mediterráneo para refrigerar los racimos. Además es también destacable la presencia de persistentes nieblas, que se repiten más de 34 días durante cada invierno.

La altitud media de los terrenos de Castell del Remei es de 250 metros. No obstante, la mayor parte de los viñedos se sitúan en zonas montañosas más elevadas, en torno a los 600 metros. Los suelos son principalmente calcáreos, aunque con una diversidad de matices que enriquece la expresión de los vinos de la finca.

La bodega cuenta con 162 hectáreas de viñedo en propiedad, y la edad media de las cepas supera los 25 años, siendo las variedades más plantadas las autóctonas Garnacha, Tempranillo, Cariñena, Trepat, Malvasía y Macabeo junto con las foráneas Cabernet sauvignon, Syrah, Chardonnay y Sauvignon blanc.

En cuanto a las instalaciones de bodega, estas abarcan una superficie total de 5.500 metros cuadrados y están distribuidas en seis naves construidas sobre piedra con estructura de hierro forjado y muros de hasta un metro de ancho. La antigua bodega se encuentra semienterrada, lo que permite mantener una temperatura regular durante todo el año. Actualmente, las estancias destinadas a la crianza de los vinos alberga un parque de aproximadamente mil barricas de roble francés y americano al 50%, mientras que la zona de vinificación está equipada con depósitos de acero inoxidable termorregulados.

El complejo en el que se ubica la bodega alberga además una antigua colonia agrícola, un lago, un santuario dedicado a la Virgen del Remedio, el propio castillo que mantiene la estructura original del siglo XIX con cuatro torres y 80 ventanas, y un restaurante abierto al público.