Finca Biniagual

La bodega se ubica en pleno corazón de la denominación, en la aldea de Biniagual, enclave histórico en el que se hacen vinos desde tiempo inmemorial. La filoxera hizo de las suyas a principios del siglo XX destruyendo la mayoría de las viñas de Mallorca.

En 1999, la Bodega Biniagual reanudó la tradición vinícola del lugar sembrando las primeras viñas, y desde 2002 está creando vinos a tener muy en cuenta. 

El entorno es maravilloso, con la propia bodega formando parte de una aldea con 14 casas, cuenta con su propio oratorio y con una explotación agrícola integral, conformando de esta manera un conjunto autosuficiente perfectamente integrado en el precioso paisaje rural de Mallorca.

En Biniagual saben que lo más importante de un buen vino es hacer un gran trabajo en el viñedo. Por eso, todo se hace a mano, incluída la vendimia para que las uvas no se dañen. El edificio de la bodega está en el medio del viñedo, con lo que es muy rápida la llegada de las uvas en plena vendimia.  

Siempre se despalilla y no se prensa, vinificando en depósitos de acero inoxidable con fermentación en frío. La crianza de los tintos se lleva a cabo en barricas de roble francés de 500 litros. 

Biniagual es un conjunto agrícola enfocado principalmente en la producción de vino pero incluye mucho más: cría de ovejas con los correspondientes cultivos para la alimentación animal, cítricos, olivos y almendros. Los aproximadamente 4.000 árboles de cítricos se reparten entre naranjos, limoneros y clementinas.