Marisol Rubio

Ambos crearon esta marca con dos objetivos principales: por un lado homenajear a sus padres por dedicar toda una vida al cuidado de la vid y del olivo, y por otro lado elaborar vino y aceite propio, donde prime la calidad y la innovación.

La familia tiene varias parcelas que comprenden alrededor de 50 hectáreas. Si bien su vino principal nace de viñedos situados en el Paraje La Rizosa, ubicado entre las provincias de Cuenca y Toledo. Este terreno tiene una extensión de 25 hectáreas y cuenta con una altitud de 837 metros. En él, las variedades plantadas son Airén, Tempranillo y Pedro Ximénez.

La familia Garrido Rubio fue pionera en la plantación de Pedro Ximenez en Castilla-La Mancha. Los resultados, frente a todo pronóstico, fueron excelentes, y en la segunda vendimia lograron el primer y único vino blanco seco 100% Pedro Ximénez de Castilla-La Mancha.

Además, en estos terrenos se ubica un olivar centenario, donde predomina la variedad cornicabra. La rusticidad de esta variedad le permite adaptarse perfectamente al clima seco y calizo de la zona de Toledo y además logra superar bien el frío invernal.

Con todos estos recursos a su disposición, los hermanos Garrido Rubio lanzaron al mercado, en 2018, la marca Bodegas Marisol Rubio, con una edición muy limitada de tan solo 1.455 botellas que obtuvo muy buenas valoraciones por parte del público general y también de los críticos especializados.