Don Julio

Para muchos aficionados, los tequilas de Don Julio son los mejores del mundo. A nosotros nos encantan y no diremos lo contrario. [break]

El tequila de calidad es una bebida para tomar sola en el caso de los añejos o en cócteles como el paloma o el margarita en el caso del blanco y del reposado, aunque un ‘old fashioned tequila’ con 1942 o con el Reserva Añejo son palabras mayores.

Muy pronto vas a estar inmerso en festividades por doquier y tendrás muchas ganas de combatir la falta de luz y los días más cortos celebrando la noche con buenos tragos. Y ahí entra la extrema calidad de Don Julio; vas a impresionar a cualquiera cuando abras el mueble bar y sin darte importancia sirvas unos buenos tequilazos al personal. 

Los cuatro que te servimos son un modo sinigual para acercarte a este maravilloso universo del tequila suave, cremoso, fresco y tentador. Mete en el baúl de los recuerdos y cierra con llave el chupito con rodaja de limón y sal de tus tiempos mozos, y déjate acariciar por estos que juegan en la máxima categoría y merecen ser degustados con mimo, curiosidad y placer hedonista.  

Todos son perseguidos por medio mundo, sobre todo en México y en el gran mercado donde acaban la mayoría, Estados Unidos. Los cuatro son grandes embajadores y fieles representantes de la destilación del mejor y más puro agave azul, la planta tradicional y materia prima de la que nace el tequila, el destilado tradicional del estado de Jalisco. Desde los inicios de la destilería creada por don Julio González allá por 1942, estos espirituosos se hacen de la misma manera, y lo que diferenció desde siempre a esta marca fue la primacía de la calidad por encima de la cantidad para hacerlos más suaves y elegantes.

Tienes los tres estilos ante ti para que veas las diferencias, y un top: Don Julio 1942, que hace un homenaje a los inicios con un espirituoso totalmente artesanal objeto de deseo de los mejores bares del mundo. Espectaculares, con muy pocas botellas disponibles y mucha demanda. ¿Te atreves a dar el salto?