Bodegas Ondarre

En 1986 la familia Guibert-Ucín, propietaria del Grupo Bodegas Olarra, estableció una pequeña bodega familiar en Viana. Esta lleva en su nombre -"ondarre" significa "terruño" en euskera- una clara referencia a la forma en que la familia entiende la viticultura.

De este modo, la familia aprovecha la diversidad de suelos del municipio y la disposición de pequeños y viejos viñedos en las laderas que ascienden hacia la sierra para cultivar sus propias uvas. Los viñedos de la bodega son de bajo rendimiento y sobre ellos se lleva a cabo una cuidadosa selección del fruto.

Además, los bodegueros utilizan las más avanzadas técnicas de vinificación, junto a una producción muy limitada, para otorgar a sus vinos la más alta calidad. Un ejemplo de ello es la constante renovación de la madera de las barricas para acentuar la personalidad de los vinos.

En definitiva, es mucho el cuidado que la bodega presta a cada uno de los detalles que forman parte del proceso de elaboración de sus vinos, desde la tierra hasta la crianza, buscando siempre que cada botella exprese las cualidades excepcionales de un lugar y una familia hechas para elaborar el mejor de los vinos.