C2O

Y es que los vinos de Mira do Ó se distinguen ante todo por buscar la más pura expresión del terruño, el empleo de variedades locales cultivadas con técnicas sostebibles y vinificadas con la mínima intervención, además de la obtención de vinos con un excelente potencial de guarda. En el caso de C2O, proyecto conocido también como Vinhos Mira do Ó, sigue a raja tabla estos principios en esta región de Viseu. 

En una meseta a los pies de la Sierra del Caramulo y de la Sierra de la Estrella, en la orilla derecha del río Dão, encontramos los viñedos que dan origen a los vinos de este proyecto. Crecen sobre suelos de granito y arcillosos, con un clima a caballo entre continental y atlántico. Una combinación que da lugar a vinos de textura muy rica al igual que profundos, muy elegantes y frescos que son un reflejo de esta región. 

La uva es lo más importante para Nuno. Desde su cultivo hasta su recogida en el momento óptimo de maduración, además de una vinificación poco intervencionista pero en la que se controlan todos los procesos en cada una de las fases. La reina indiscutible aquí es la Encruzado, pero también comparte su estrellato con la Jaen, la Alfrocheiro, la Touriga nacional y la Tinta pinheira. 

Poco a poco este proyecto fue creciendo, y en 2016 se expandieron a la región de Bucelas, al norte de Lisboa. En unos viñedos localizados en Frexial, cultivan la Arinto en una de las zonas en las que mejor se expresa. Fue aquí donde se inició Mira do Ó, y a donde siempre quiso volver, por lo que es un sueño hecho realidad en una botella que lleva su nombre.