Coto de Gomariz

Sí, estás ante algunos de los vinos que más destacan del panorama enológico gallego. Blancos y tintos muy bien puntuados y valorados. [break]

Todos tienen una relación valor-precio muy favorable y el destacado aval del influyente crítico Luis Gutiérrez. Cuando los cates percibirás distintos perfiles, todos estupendos, puesto que son de esos vinos que disfrutas sin pausa y a cada sorbo vas descubriendo más “cositas”.

Entre los cinco encontrarás los de la gama The Flower and the Bee, muy frescos y vibrantes, perfectos para cualquier momento, y también podrás deleitarte con el trago más sosegado y complejo, de mayor profundidad, largura y recorrido de vinazos como Finca O Figueiral Colleita Seleccionada, Coto y Abadía de Gomariz, el parcelario por antonomasia del viñedo más antiguo de la Península Ibérica, datado en el siglo XI. 

Coto de Gomariz es una bodega referencial en Ribeiro; de sus puertas no sale nada mediocre y todos tenemos la oportunidad de descorcharlos, ya que no están vetados al común de los mortales. Han sido elaborados con uvas autóctonas como Treixadura, Sousón y Brancellao cultivadas con métodos naturales y biodinámicos y vinificadas por separado para observar su evolución respetando las características de los distintos pagos y conformando vinos singulares y con personalidad propia. 

En la privilegiada zona de Leiro, provincia de Ourense, nacen nuestros protagonistas, allí donde prevalece un peculiar microclima de transición oceánico-mediterráneo y se extienden tres tipos de suelos que otorgan una complejidad adicional a los vinos, muy frescos y aromáticos en el caso de los blancos, y con cierta rusticidad agradable y mucho carácter en los tintos. 

Nuestra recomendación es que los pruebes todos y disfrutes de todas sus capas e idiosincrasias, pero en el caso de los más top, como Finca O Figueiral Colleita Seleccionada, goces de él ahora, pero si puedes guardar al menos una botella durante unos meses u años, vas a sentir “cosas maravillosas”, como dijo Howard Carter cuando descubrió la tumba de Tutankamón. ¿Exagerado? Puede que sí, o puede que no, como diría un lugareño de la zona. Ya nos lo contarás.