Descripción

Palpite es un blanco fermentado en barrica del proyecto alentejano de António Maçanita. También es la palabra portuguesa para referirse a corazonada o intuición (pálpito) tantas veces determinante durante todo el proceso de elaboración de un vino. En esta ocasión ha alumbrado un delicioso coupage de variedades autóctonas alentejanas que combina por igual complejidad y frescura

Ficha técnica

Tipo
Blanco Fermentado en Barrica
Añada
2019
Grado
13.5% vol.
Producción
9.312 botellas
Variedad
63% Arinto, 7% Tamarez, 30% Otras
Otros formatos disponibles:
Origen
Vinho Regional Alentejano

Cata

Vista
Dorado pajizo.
Nariz
Intensa y compleja, con notas especiados, de pomelo y crema.
Boca
Plena y rica, con textura y cremosidad, acidez sostenida que se alarga hasta el final, trago largo y persistente.
Temperatura de servicio
Se recomienda servir entre 10 y 12 ºC.
Consumo
Óptimo desde el momento de la compra y hasta 2029, aproximadamente, si se conserva en adecuadas condiciones.
Maridaje
Su cuerpo y textura lo convierten en un vino muy versátil gastronómicamente hablando. Especialmente recomendable con todo tipo de mariscos y pescados tanto al horno como en salsa.

Viñedo y elaboración

Descripción
Viñas repartidas por la región del Alentejo.
Suelo
Pobre, de esquistos o granito.
Clima
Continental con influencia mediterránea, grandes contrastes de temperatura entre el día y la noche.
Rendimiento
7.000 kilogramos por hectárea.
Cosecha
Vendimia manual en pequeñas cajas.
Vinificación
Mesa de selección. Prensado suave de los racimos enteros seleccionados a baja temperatura. Decantado natural del mosto antes de fermentar. El 50% fermenta en barricas nuevas de roble francés. La maloláctica del 10% en las mismas barricas.
Envejecimiento
La totalidad del vino es sometido a 15 meses de crianza en barricas de roble francés con removido frecuente de lías.

Opinión de los críticos

The Wine Advocate:

The 2019 Palpite Reserva Branco is a blend of Arinto (63%), Tamarez (7%) and the rest a field blend. It was aged for 15 months in 20% new French barrels. It is very dry (less than a gram of residual sugar) and comes in at 13.5% alcohol. While the winery trots out a wave of unusual whites these days, this is the old tried-and-true standby in a more familiar style, even if the blend has changed a bit with the acquisition of a new vineyard in 2018. Fresh, elegant and clean, this is a classic wood-aged food wine. It's easy to drink, textured and finishes well. It's a reliable old friend among a slew of different labels. There were 8,200 bottles produced.