Descripción

Viña Cubillo procede de una finca llamada Viña Cubillas, adquirida al igual que el resto de viñedos de la casa por el bisabuelo de los López de Heredia. Esta finca entrega vinos excepcionales que se comercializan todos los años como crianzas, pero que por las excelentes condiciones de calidad de los suelos podrían ser destinados perfectamente a vinos calificados como Gran Reserva.

Ficha técnica

La bodega
Tipo
Tinto Crianza
Añada
2012
Grado
13.5% vol.
Producción
94.500 botellas
Variedad
65% Tempranillo, 25% Garnacha, 10% Mazuelo, Graciano
Otros formatos disponibles:
Origen
Rioja

Cata

Vista
Color rubí brillante.
Nariz
Fresco y ligero aroma a regaliz, con textura consistente y persistente.
Boca
Fina, fresca y duradera.
Temperatura de servicio
Se recomienda servir a 16 ºC.
Consumo
Óptimo hasta 2027 aproximadamente si se conserva en buenas condiciones.
Maridaje
Es el perfecto acompañante de todo tipo de legumbres, tapas y entremeses variados.

Viñedo y elaboración

Descripción
Viñedos situados a 465 metros de altitud sobre el nivel del mar.
Edad
40 años.
Suelo
El terreno es de la era terciaria y de naturaleza arcillo-calcárea.
Clima
La añada de 2012 estuvo condicionada por las escasas lluvias, un 25% menos que las que habitualmente caen en la comarca. Fue un año especialmente seco hasta bien entrado el otoño, ya que casi un 35% de la precipitación total se ha concentró en los tres últimos meses del mismo. Esta baja pluviosidad y las altas temperaturas de la primavera y el verano supusieron un importante adelanto de la vendimia, similar al de la cosecha anterior., aunque las lluvias que comenzaron el día 11 de octubre supusieron que las labores de recolección se prolongasen hasta el día 18 de octubre, cinco días más tarde que en la vendimia de 2011, pero una fecha aún muy temprana para lo habitual en Haro.
Cosecha
Vendimia manual.
Envejecimiento
Crianza en barrica durante 3 años, sometido a dos trasiegos por año.
Embotellado
Clarificado con claras de huevo. Embotellado sin filtrar.

Opinión de los críticos

James Suckling:

Wonderful aromas of mushrooms, bark, cigar tobacco and plums with just a hint of citrus. Full-bodied with incredible softness and complexity. Subtle chocolate, fruit and walnut in the aftertaste. Goes on for minutes. Fantastic wine. Classic, textbook Rioja. A joy. Incredible value! Drink or hold.

The Wine Advocate:

I was quite impressed by the 2012 Viña Cubillo Tinto Crianza, a classical Rioja that is nicely crafted, with less aging in barrel than the rest of reds and therefore with more fruit character and less López de Heredia signature. This was born as a red for tapas, a blend of 70% Tempranillo, 20% Garnacho and 5% each Graciano and Mazuelo with 13.5% alcohol. It matured in well-seasoned American oak barrels for three years. It has ripe fruit (black rather than red) without excess and a pinch of spices and a twist of oak. 94,500 bottles produced. There are seven lots of this. I tasted a bottled that was filled in May 2018.

Tim Atkin:

The water-retaining clay soils of Viña Cubillo are a godsend in a drought vintage like 2011. Combining Tempranillo with 35% Garnacha, Mazuelo and Graciano, this is spicy and a little wild, with assertive acidity, tobacco and red berry flavours and an appealing lightness of touch embellished by savoury tannins. 2021-25

Decanter:

The Cubillo Crianza is aged for three years in barrel and then at least two more in bottle before release, and therefore could technically fall into the Gran Reserva rather than Crianza category. The wine has an unusually high percentage of Garnacha in the blend; a varietal which often yields a softer, fleshier more generous style. Not so with 2012, a dry year with a relatively early harvest; that's what the book says, and yet the wine is wonderfully composed, with bright natural acidity, citrus fruit and hints of orange peel evidenced, all dancing around the fruit bed of flavour, the deftly savoury backdrop holding the ensemble together effortlessly. Beautifully fine and refined tannins complete the picture; there is almost a hint of salinity on the back palate, unusual in a red wine, the request for food subtly yet duly registered.