Herdade Grande

Y es que Herdade Grande es una de las bodegas familiares más antiguas del Alentejo. Su preservación de los valores tradicionales y la forma de hacer vino han hecho que las tres generaciones que han seguido el camino de su predecesor, hayan convertido a esta casa en una bodega de referencia en esta región. 

En 1946, tras fallecer Ernesto, su hijo Eduardo se hizo con las riendas de Herdade, continuando con la labor iniciada por su padre y elaborando anualmente su vino preferido: Vinho da Talha. Este vino tan típico es uno de los grandes tesoros de la D.O., ya que su forma de vinificación se ha sabido preservar desde los tiempos del Imperio Romano. 

Pero quien realmente revoluciona Herdade y la lleva a su máximo potencial es el hijo de Eduardo y nieto de Ernesto: António. En 1970 termina sus estudios como ingeniero agrónomo y decide expandir la propiedad plantando viñas nuevas, conquistando asi las 60 hectáreas. Apuesta por la diversidad de variedades tanto nacionales como internacionales, pero siempre teniendo en cuenta la adaptabilidad del terroir y la manera de preservar las características tan típicas de los vinos de esta región. 

Unos años después de esta expansión, en 1997, António decide empezar a embotellar y llevar al mercado sus propios vinos, ya que hasta ese momento producían para la Adega Cooperativa da Vidigueira. Es así como nace realmente la marca de Herdade Grande, cuya fama no ha parado de crecer entre los winelovers más entregados. A día de hoy, Mariana, la cuarta generación de los Lança, es el futuro de esta casa y lleva las bodegas mano a mano con su padre, de quien ha seguido sus pasos licenciándose como ingeniera agrónoma y enóloga.