La existencia de esta bodega está documentada desde el año 1782, pues se hace referencia a la misma como "una casa con bodega situada en Lugana, en el término de Sermione y perteneciente a los Fratti".
Fue en el año 1939 cuando Felipe Dal Cero, hijo de Domenico (viticultor en Montecchia di Crosara, en Verona), adquiriese esta propiedad, poniendo en valor su potencial.
Tras treinta años de trabajo el hijo del fundador, Pietro Dal Cero, se hizo cargo del negocio familiar y vio cómo sus esfuerzos se materializaban en su primer vino: Lugana Casa dei Frati.
Desde el año 2012 la propiedad está dirigida por Rosa, mujer de Pietro, y los hijos del matrimonio, Anna María y Gian Franco, quienes la gestionan con la misma pasión y entrega que su padre.