La bodega Kühling-Gillot posee desde hace siglos diversos Grand Crus a lo largo del Rin y Roter Hang en Rheinhessen, situados en una de las zonas vinícolas alemanas más famosas.
Entre Bodenheim y Oppenheim cultivan de forma ecológica y biodinámica las variedades Riesling y Pinot Noir, sobre las típicas laderas empinadas.
Desde 2005, Kühling-Gillot ha añadido la biodinámica a sus prácticas de agricultura ecológica. No cargar el suelo y las vides con fertilizantes sintéticos es uno de los principales objetivos. Pero además de los procesos del suelo, que influyen en la formación de frutos, están los procesos de luz, cuya huella es cada vez más importante. La aplicación de preparados e infusiones ha supuesto un importante fortalecimiento de las vides. Crecen de manera más uniforme y responden mejor al calor y la humedad, lo que ayuda a prevenir enfermedades y el exceso de madurez.