Rodeada por las sierras del Perdón y Sarbil y a tan sólo 8 kilómetros de Pamplona, se encuentra la Bodega Otazu, una de las bodegas más al norte de España que elabora vino tinto.
Bodega Otazu está ubicada en un paraje idílico donde el cultivo de vid y la elaboración del vino han existido desde la Edad Media, cuando ya gozaban de notorio prestigio.
Documentos encontrados en el Archivo General de Navarra demuestran que la Corte Real de Carlos III, rey de Navarra, disfrutaba de los vinos elaborados en Otazu.
Construida en 1840, supuso en aquellos tiempos una revolución al haber separado la bodega del casco urbano. Siglo y medio después, se ha remodelado la bodega existente y se ha construido una nueva que comunica con la anterior.
Hoy en día, cinco edificios conforman elSeñorío y la Bodega Otazu. Todos ellos cargados de historia. La iglesia de San Esteban, que data del siglo XII, la Torre de Otazu, construida tres siglos después y el Palacio Renacentista del siglo XVI. Los dos edificios restantes son la antigua y la nueva bodega.
En Bodega Otazu conjugan el vino con la arquitectura y el arte contemporáneo. Al igual que se ha preservado un patrimonio arquitectónico de gran valor, han vuelto la mirada a la cultura con una colección de arte.
Los vinos se elaboran con uvas procedentes del viñedo propio de 110,12 hectáreas que rodea la bodega. Su orientación norte-sur, permite que los racimos consigan una excelente exposición.
Las condiciones climatológicas de Otazu son muy similares a las de las tierras vecinas de Burdeos. Se trata de clima continental de influencia atlántica.
Cultivan, Merlot, Cabernet sauvignon, Tempranillo y Chardonnay, plantadas estratégicamente en cada uno de los diferentes suelos y zonas de la finca, buscando el mayor potencial de cada variedad.